Más de dos meses sin escribir unas letras...y es que el verano ha sido largo, intenso y emocionante...
En total dos meses de aquí para allá, y acullá...o sea Barcelona-Oropesa-Barcelona-Bilbao-Barcelona-Oropesa-Barcelona-Bilbao-Barcelona...con niños, sin niños, con más niños y sin niños otra vez...de madre soltera, de novia, de madre de familia numerosa y de novia otra vez...
Y hoy ya estamos a 21 de septiembre, y hace nueve días que mis hijos iniciaron el nuevo curso escolar...y hace seis que yo empecé mi propia rutina y me estrené como personal fijo en esta facultad...Todavía no me lo creo... después de once años y medio de trabajar en este mismo puesto por primera vez... y por primera vez en mis casi 43 años, tengo trabajo estable y para toda la vida...
Ha sido como volver a casa...siento una tranquilidad, unida a la incredulidad, que hace que me sienta realmente extraña...
Por eso y por todo lo que me ha costado llegar hasta aquí, doy gracias a la vida por haberme compensado...creo que jamás volveré a quejarme del trabajo, de los madrugones...ni siquiera si me bajan el sueldo...porque soy una privilegiada, porque voy a poder sacar mi vida, mi casa y mis hijos adelante, sin estrecheces...y eso, con la que está cayendo, no es moco de pavo :))