viernes, 20 de abril de 2012

Love by sex



Que hombres y mujeres somos diferentes es algo que todo el mundo sabe, pero que no todo el mundo asume... sobre todo nosotras... algunas seguimos empeñadas en convertir a los hombres en algo que nunca podrán ser, básicamente porque genéticamente es imposible.... Una vez asumes que el otro sexo no es opuesto, sino complementario y dejas de imitar ser lo que no eres y de tratar que el otro haga lo propio, es entonces cuando estamos más cerca de entendernos...

La única cosa que nos une a hombres y mujeres es la atracción mútua... ese deseo irrefrenable que nos lleva a querer descubrirnos... pero claro siendo tan distintos no íbamos a dejar de serlo en esto también... Cuando un hombre se prenda por una mujer lo hace por fuera primero, sin ropa después y ya si eso, por dentro al final... y tan impulsivos ellos lo hacen sin medir demasiado las consecuencias... por norma general se tiran a la piscina haya agua o no... y claro, así les luce el pelo después... les brilla la grasa casposa como a Torrente... Y aquí está una de las claves que nos diferencian... que a ellos todo les entra por el ojo y a nosotras por el oído... El procedimiento es sencillo: le gusta mucho tú físico, le pones mil... si además eres simpática y le haces reír, e importantísimo, le ríes a él sus ocurrencias... eres máximo objetivo... si el hombre está instruído, valorará que seas medio culta, pero como algo secundario... lo primordial es el impulso sexual que le despiertas y que le hace sentirse enamoriscado... 
Y es aquí donde nosotras movemos los hilos de la incipiente relación... Los hombres por naturaleza les gusta lo difícil, lo imposible, los retos, la competición... y huyen de lo fácil... porque no nos olvidemos que los hombres nunca dejan de ser niños y no dejan de fantasear con cosas más o menos irreales... 
Y ahora puede sonar antiguo, retrógrado, machista y manipulador... pero si un hombre, así de interesado en una mujer, consigue llevársela a la cama en la primera cita, automáticamente bajará su interés, por ella, puede incluso que a cotas mínimas, o sea a que desaparezca del mapa...

No quiero con esto decir que debamos guardarnos enteras y pudrirnos sin sexo esperando al adecuado... nada más lejos de mi intención... si a alguna de nosotras nos pone un hombre, adelante, a la cama con él... pero tengamos en cuenta varias cuestiones:
Nunca pretendas enamorar a un hombre a través del sexo... lo más probable es que no haya nada más... o sí...
Si un hombre te interesa de verdad, pónselo un poco difícil... mientras jugáis al ratón y al gato os divertiréis, os conoceréis un poco más, y si realmente él está por ti, como tú pretendes, no cejará en su empeño por conseguirte... así, para cuando decidas que te empotre, estará totalmente coladito por ti... o no...
En cualquiera de los casos, si la relación no chuta como prometía, no nos fustiguemos con qué dijimos o no dijimos, con qué hicimos o no hicimos... Y es que siempre se nos olvida que enamoriscarse es fácil, pero enamorarse difícil y que además ese amor sea correspondido, a ciertas edades, un milagro!!

Para otra ocasión dejo las fases del enamoramiento ;)